jueves, marzo 11, 2010

SEMANA DE PEINETAS


Si ayer ya comentaba la peineta de Aznar, y las razones por las que el pueblo quizás estuviera en desacuerdo con él... hoy volvemos a la carga.

Más no es por Aznar, es por alguien mejor educado. Aunque, en vista de lo sucedido, dudo de esa educación. Froilán, el "infante terrible" se ha propuesto suceder a Aznar en este ránking de la corrección política y el buen gusto.

Ahora va a ser un problema hasta trabajar como fotógrafo. ¿Qué le puede molestar a un niño de esa edad? ¿Acaso algún paparazzi le había preguntado sobre alguna supuesta relación con alguna compañera del cole? ¿A quién el había tirado de las coletas? ¿Con quién compartió el último bocadillo de Nocilla?

Si alguien se le ha acercado para importunarle de esa forma, entiendo que esté algo descontento. Pero, si no... que será lo más normal, porque la nobleza tiene para poder pagar seguridad para parar un tren... lo único que le debe molestar es que haya periodistas allá donde va cuando es hijo de quien es. El precio de ser un personaje popular es tener todo el día a los periodistas pegados a tu trasero, y eso es algo de lo que hay que ser consciente. Pero supongo que para la edad de un niño tan joven en estas lides, no cabe en su real cabeza que haya tanta gente encima de él interesándose por nada. Porque, peinetas y patadas en la espinilla aparte, Froilán no es que sea una fuente inagotable de noticias. Es hijo de quien es hijo y ya está. No hay más noticia. Y sin embargo, aquí estamos hablando chuminadas, pero si nosotros hablamos chuminadas, es porque los medios serios de comunicación, las comentan casi en plan exclusiva. Mira, quizás esos medios bien merecerían una peineta por estar hablando todo el santo día mal de aquél a quien no conocen.

Al final no sé si me estaba metiendo con el chaval o defendiéndole, ¿ustedes qué creen?